INVESTIGADORES ENCUENTRAN VÍNCULO HORMONAL ENTRE DIETA Y OBESIDAD

En un nuevo estudio, los investigadores descubrieron que los niveles bajos de una hormona circulante llamada adropina predicen un aumento de peso y una desregulación metabólica durante el consumo de una dieta con alto contenido de azúcar en un modelo de primate no humano.

Según el estudio publicado en el “Journal of Biological Chemistry”, estos hallazgos ayudarán a preparar el escenario para desarrollar nuevas terapias para controlar las enfermedades metabólicas.

La obesidad es una creciente crisis de salud pública, que trae consigo muchos factores de riesgo graves, como las enfermedades cardiovasculares y la diabetes tipo 2. Como la cantidad de personas con sobrepeso u obesidad ahora supera en número a las personas con un peso corporal saludable en una proporción de dos a uno, los investigadores se enfrentan a la necesidad urgente de comprender mejor cómo quema combustible el cuerpo.

Hace varios años, Andrew Butler, profesor de farmacología y fisiología, descubrió la hormona peptídica adropina. La investigación realizada por el laboratorio de Butler sugirió que la adropina regula si el cuerpo quema glucosa o grasa.

También encontraron que los hombres jóvenes con niveles altos de adropina tenían niveles más bajos de índice de masa corporal (IMC). Además, algunos estudios indican que la baja adropina está asociada con biomarcadores de resistencia a la insulina. En el estudio actual, Butler y sus colegas han realizado estudios en el Centro Nacional de Investigación de Primates de California para explorar el papel de la adropina en la salud metabólica.

Examinaron el plasma de 59 macacos rhesus adultos machos que fueron alimentados con una dieta alta en azúcar. En general, el consumo de la dieta con fructosa produjo un aumento del 10% en el peso corporal y un aumento de los niveles de insulina en ayunas, lo que indica resistencia a la insulina, lo que reduce el uso de glucosa y los triglicéridos en ayunas elevados, que en los humanos aumentan el riesgo de enfermedad cardiovascular.

Los animales con concentraciones plasmáticas bajas de adropina desarrollaron un síndrome metabólico más grave. Curiosamente, el desarrollo de diabetes tipo 2 solo se observó en animales con bajas concentraciones plasmáticas de adropina. Esto es consistente con la idea de que la expresión de adropina se controla a través de mecanismos “relacionados con el reloj”.

Fuente: https://www.thepeninsulaqatar.com

Referencia: Butler AA, Zhang J, Price CA, et al. Low plasma adropin concentrations increase risks of weight gain and metabolic dysregulation in response to a high-sugar diet in male nonhuman primates. J Biol Chem. 2019 Apr 15. pii: jbc.RA119.007528.